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Camino Portugués

El culto xacobeo y la peregrinación a Compostela permitieron el intercambio cultural, económico y de pensamiento en la Europa medieval. En torno a los caminos surgen edificios para el culto vinculados a este fenómeno. La comarca de Pontevedra no queda ajena a la influencia xacobea. El Camino Portugués sigue el trazado de la antigua Vía Romana XIX, construida en tiempos de Augusto (s. I), y se caracteriza por la gran riqueza monumental y patrimonial. Atraviesa Terras de Ponteveda de sur a norte, siguiendo un foso de origen tectónico conocido como Depresión Meridiana.

El Camino Portugués hace su entrada en Terras de Pontevedra en el tramo Redondela – Pontevedra, que parte de Redondela pasando por Arcade, para continuar hasta la ciudad histórica de Ponte Sampaio. Después de atravesar la vieja ‘pontella’ de A Ponte Nova sobre el río Ulló, el peregrinaje continúa por la Vrea Vella da Canicouva, antiquísimo camino empedrado. El cruce que presidía el ‘cruceiro’ de Cacheiro conduce a los restos de una posada. El Camino nos lleva hasta Santa Marta de Gandarón, después de dejar atrás los lugares de Bergonde, Boullosa, Alcouce y Bértola, en el municipio de Vilaboa. Tres kilómetros más adelante, caminando por asfalto, se llega a la ciudad de Pontevedra, donde la influencia xacobea deja una profunda huella.

Pontevedra recibe al peregrino por el camino de Gorgullón, Virxe do Camiño, Sagasta y Glorieta de Compostela, desde donde la ruta continúa por la calle Peregrina hasta llegar al santuario de la Peregrina (s. XVIII), parada indiscutible para los devotos peregrinos. El edificio es obra del arquitecto Arturo Souto, y la mayor de sus particularidades redunda en la planta, en forma de concha de vieira.

Continuamos por el casco histórico de la ciudad a través de la Ferrería, hermosa e impresionante plaza que debe su nombre al trabajo de forja que antiguamente se practicaba en este emplazamiento. Entre sus atractivos destaca la iglesia conventual de San Francisco (s. XIV), con las características propias del gótico mendicante; los jardines de Casto Sampedro; y la hermosa fonte da Ferrería (s. XVI).

La calle Soportais continúa el trayecto del peregrino, que después de pasar la praza do Teucro, continúa por la calle Real, para salir finalmente de la zona vieja de la ciudad y atravesar el emblemático puente del Burgo.

Pero antes de salir del casco histórico de la ciudad se aconseja al peregrino no abandonar Pontevedra sin visitar el Museo de Pontevedra, conformado por varios edificios, entre los que se encuentran las misteriosas ruinas del convento de Santo Domingo (s. XIV-XV), referente del gótico gallego, situadas cerca del santuario de la Peregrina, al final de la calle Michelena. El museo cuenta además con otros cuatro edificios históricos con fondos de todo tipo, entre los que cabe destacar la colección de orfebrería prerromana, sus salas de pintura y grabados y la sala de azabaches compostelanos, considerada como una de las mejores de España. Recientemente se ha añadido un moderno y sexto edificio de 10.000 m2, preparado para acoger exposiciones, tanto permanentes como temporales.

Tampoco se debe dejar de visitar la basílica de Santa María la Mayor, templo patrocinado por el gremio de mareantes de Pontevedra en el siglo XVI, cuya arquitectura mezcla el gótico tardío con las tendencias renacentistas. Entre los numerosos atractivos de este edificio destaca la fachada con aspecto de retablo pétreo.

Salimos de Pontevedra para iniciar el tramo Pontevedra -Padrón, que finaliza su paso por Terras de Pontevedra después de atravesar el municipio de Barro.

El peregrino deja atrás la ciudad de Pontevedra por las calles de A Santiña, A Gándara y Ferreira. El camino avanza contorneado en su margen derecha por un castañal, paralelo a la vía del ferrocarril, pasando por Montecabras para llegar, entre pinos y eucaliptos, hasta la iglesia y rectoral de Santa María de Alba. Desde allí continúa hasta Goxilde, atraviesa la capilla de San Caetano, los bosques de Reirís y Lombo da Maceira, San Mauro, San Mamede da Portela y Ponte Balbón -con dos ‘cruceiros’, uno de ellos junto a la Casa de Amonisa, y otro cuyo fuste Santiago Peregrino indica el Camino a sus romeros-.

Atento a la señalización, el peregrino continuará hasta la capilla de Santa Lucía, en Ámela. Conviene destacar en este recorrido un pequeño desvío hasta la iglesia de San Martiño de Agudelo, en Barro. Construido a inicios del siglo XIII, el templo es un claro ejemplo de la extensión de la influencia del Mestre Mateo, patente a través de las características arquivoltas de medio punto en su portada, decoradas con temática vegetal, heredera del Pórtico de la Gloria.

Otro interesante desvío que vale la pena si el visitante dispone de tiempo nos conduciría hasta el espacio natural Ría Barosa, en A Maquieira, donde se puede visitar un magnífico conjunto de 17 molinos tradicionales situados sobre el río Ameixeira.

El lugar de Tibo dará paso a la recta final de este tramo, hasta la villa de Caldas de Reis, bañada por el río Umia y Bermaña.

Links de interés

XACOBEO: www.xacobeo.es
TURGALICIA: www.turgalicia.com
AYUNTAMIENTO DE VILABOA : www.vilaboa.org
AYUNTAMIENTO DE PONTEVEDRA: www.pontevedra.galwww.turismoenpontevedra.es
AYUNTAMIENTO DE BARRO: www.barro.es
MUSEO DE PONTEVEDRA: www.museo.depontevedra.es

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